Domingo de Ramos a la Covid, así fue la bendición de palmas en Puebla
Redacción
Como fue anunciado durante la pasada misa dominical y derivado de la actual emergencia sanitaria por Covid-19, el Domingo de Ramos en la Catedral de Puebla fue realizado con bendiciones hasta los lugares de los fieles católicos.
Desde el inicio de la celebración eucarística y tras indicaciones del arzobispo Víctor Sánchez Espinosa, sacerdotes recorrieron el recinto para, de manera distinta a años pasados, se cumpliera con la celebración tradicional.
El líder de la gray católica en el estado destacó que en esta ocasión los festejos son bajo responsabilidad ya través de protocolos, a fin se preservar la vida propia y familiar.
“Estos días son días santos y tenemos que vivirlos santamente, como he anunciado en domingos anteriores estamos celebrando nuestra fe con los protocolos necesarios, pero estamos celebrando nuestra fe con mucha responsabilidad para cuidar nuestra vida y nuestra salud y cuidar a nuestras familias”, comunicó Sánchez Espinosa.
¿QUÉ SIGNIFICA EL DOMINGO DE RAMOS?
El “Domingo de Ramos” es una celebración que se niega a morir y que cada día se hace más fuerte en todos los municipios de la región de la Mixteca, como una forma de celebrar el inicio de la Semana Santa.
De acuerdo con el vicario de la parroquia de San Juan Bautista de Acatlán, Sergio Ramón Sánchez, para la iglesia es celebrar y recordar la entrada triunfal de Jesús en Jerusalén, acorde al pasaje donde ya después de vivir muchas pascuas judías Jesús va a hacer su entrada especial.
Dijo que Jesús entra montando en un burro a Jerusalén y la gente empieza a cantar vivas, a cantar alabanzas y hosannas.
Mientras que el párroco de San Pablo Anicano, Santiago Sandoval Morales, explica que en este día se realiza la bendición de las Palmas que simboliza una renovación de la fe en Dios, además dijo que se hacen cruces con las Palmas, aunque estas no deben ser utilizados como amuletos, sino se deben tener un sentido religioso.
Redacción: Claudia Hernández/El Sol de Puebla
Fotografía: José Luis Bravo/El Sol de Puebla
